Vistas de página en total

martes, 31 de enero de 2012

Déjame ser tu historia.


Retozas en la inmensidad de tu lecho,

Dejando que tu cuerpo disipe sus alegrías,

Mientras mi mirada se deposita en ti.

Aferrándose a la ingravidez de tus senos.



Mis manos se aferran a tus caderas,

De hermosa mujer en celo,

Llenando mis ansias de ti sobre el lecho,

Donde las flores retoñan en su invierno.



Mis labios cruzan su aventura,

En el recorrido que hace de tus pies,

Explorando tus sentidos,

Y llenándose de ti.



Mis manos sedientas de ti,

De tus mieles que recojo con mis labios,

Que degustan de tu pasión,

De sirena varada en mis playas.



Mis sentidos se atrapan de tu cabello,

Halando sus deseos en la intimidad del beso,

Donde recataremos nuestras ansias,

De amarnos en el silencio expectante.



Déjame amarte vida mía,

Deja que mis poemas se llenen de ti,

Déjame vaciar mi amor sobre tu piel,

Llenando tus deseos de amor.



Déjame amarte como jamás,

Déjame recorrer tu geografía,

Déjame tatuar tu alma,

Con el susurro de mis versos.



Déjame tomarte entre mis brazos

Llevándote al mundo que he creado,

Solo para ti vida mía,

Déjame amarte en cada noche.



Deja que me filtre entre la luz de la luna,

Entre la brisa que se cuele en tu alcoba,

Entre el agua que molde tu cuerpo,

En cada suspiro que siembres.



Déjame amarte,

Día a día en el horizonte,

Déjame verte en las estrellas,

Y saber que mi luna serás tú.



Y borrare mi pasado

Escribiendo mi historia,

En tu piel crispada de mis besos,

Y tu alma tatuada de mi.



José Flores.

1/31/12.

No hay comentarios:

Publicar un comentario